Por Alejandro Ruíz Robles
De acuerdo con la Biblia, Adán y Eva fueron los
primeros habitantes en el Paraíso y seguramente es ahí adonde nuestras almas justas
irán después de la muerte para gozar de la felicidad completa en presencia de
Dios. No obstante, también es una elección ver en la tierra un edén óptimo para
desarrollar nuestras ideas y emprendimientos.
Y es así como quiero entender la realidad y
compartirla con quienes me rodean. Estoy convencido de que la fortaleza de uno
está en uno; no hay que salir a buscarla. Para irradiar luz, hay que ser luz,
ya que nadie da lo que no tiene. Y ese es el punto, reconvertir lo que
pensamos y lo que somos para ser las personas que necesitamos ser para nosotros
y para quienes amamos.
Esto puede sonar utópico y sin duda, habrá gente
que deje de leer este texto por considerarlo ajeno a la realidad, pero si tan
sólo nos diéramos la oportunidad de cambiar nuestra apreciación de la misma
para mirarla con ojos positivos y crear un entorno mejor, quizás ahí esté la
razón para llegar al final de este texto.
Tan negativo como una pesadilla.
Sin duda que hay cientos de razones para ser duro
con nuestro entorno, basta enunciar algunas de ellas: muertes y afectaciones en
personas y empresas que ocurren cada día derivadas de políticas públicas
erróneas y falta de compromiso de la gente; división y confrontación entre los
grupos sociales; manipulación y destrozos por intereses políticos distintos al
sentir de la mayoría; confrontación constante entre la Sociedad y los Poderes Legislativo
y Judicial derivados del actuar del Ejecutivo; inseguridad e incertidumbre por
la falta de compromiso de las autoridades con sus gobernados.
Ante esto, es legítimo que cualquiera no
sólo se preocupe de su entorno sino que pierda la esperanza de continuar su
camino; sin embargo, siempre hay una luz al final del túnel y eso es en lo que
debemos trabajar.
Si logramos cambiar la actitud y pasamos de
preocuparnos de nuestra situación por ocuparnos de cómo hacerla favorable,
estaremos a un paso de ser el motor que dinamice a nuestro medio y de ahí,
generar un impulso común.
¡Se Vale Soñar!
Las dudas y los temores son sólo impedimentos en
nuestro actuar; es momento de soñar y realizar. … ¿Cuántas personas no han
caído desde antes de que salga la bala? … ¿Cuántos no se han rendido sin
iniciar una batalla? … ¿Realmente estamos hechos para fracasar sin intentarlo?
… ¡Mi respuesta es NO! … Y eso es lo que quiero, vivir y mostrarlo a quienes me
importan. Si algo he comprobado, es que a pesar de las circunstancias
basta una chispa para encender un matorral. … ¡Es tiempo de ser esa chispa!
El valor del compromiso con nuestros sueños es un
factor detonante en el cambio que podemos mostrar en nuestro entorno. Si algo
tenemos los soñadores, es la lealtad por sensibilizarnos de la realidad y
buscar transformarla a nuestro favor. Ningún juego se gana si no hasta el
último instante y hay que entender que estos momentos que nos distraen e
inquietan distan mucho de ser el preámbulo del silbatazo final.
En nuestra sociedad, la gente se ocupa más de la
destrucción que de la construcción, se habla más del caído que del victorioso y
si se tiene que hablar de este último, siempre habrá argumentos para
menospreciarlo. Es decir, hablamos más del fracaso y desafortunadamente, predomina
el temor al triunfo por no considerarlo posible. ¿Ilógico? Lo es, pero no nos
percatamos que el fracaso no significa una derrota, el fracaso implica
que se tuvo el valor y se intento; no alcanzar el resultado óptimo, no
significa que la vida sea una pérdida de tiempo. Ojalá hubiera millones
de fracasados porque eso significaría que habría millones de experiencias e intentos;
que servirían de aprendizaje para sí mismo o para otros. No alcanzar los
resultados deseados es una oportunidad de hacerlo de otra manera y buscar
nuevas satisfacciones.
En estos momentos, saberte con salud es la base
para desarrollar tu emprendimiento con más posibilidades de alcanzarlo.
Establecer tus metas y tener la facilidad de modificar tus planes sin duda
serán habilidades que favorecerán tu andar. Tu ímpetu y optimismo a cada paso
será el motor generador de reacciones entre las personas que te rodean, Apóyate
en ellos para desarrollar sinergias y, sobre todo, dialoga para encontrar un
lenguaje común acorde a tus metas. Compartir las satisfacciones a cada paso
serán tu forma de vida. Una palabra de aliento en los momentos de fallas
propias, ajenas o comunes, puede ser el factor de unión para alcanzar mayores
distancias.
Sueño Posible.
Siempre tienes dos opciones: Cerrar los ojos
a una realidad que te ahoga o Mirar el mundo, entender las necesidades de las
personas y atenderlas para su satisfacción. Tú eres de los segundos y
por eso has llegado hasta aquí … ¡TÚ eres un factor de cambio! …
¡Bienvenido al Club de los Fracasados!
Intentar, Emprender, Errar, Fracasar, Triunfar …
¡Son acciones comunes a quienes cambian el mundo! Ningún verbo es tan fatídico
como el de claudicar.
Cambia tu visión y transforma tu mundo, tus sueños
pueden ser tus realidades. Tu esfuerzo puede ser la imagen que inspire a otros en su camino.
Tú escoges: ¿Vivir conforme a tus sueños o Morir
por tus miedos?, ¿Ser sonrisa o ser mueca?, ¿Ser tú o intentar ser alguien
más?, ¿Comprometerte con tu entorno o dejar que el mundo gire?, ¿Hacer de tu
Vida un Paraíso o un Infierno?
Yo como muchas de las personas que requiere
nuestro mundo elijo el optimismo y por ende, acepto el poder que tengo de
transformar mi entorno y compartirlo con quienes me importan.
3 Comentarios
Felicitaciones por seguir transformando este paraíso!!!
ResponderBorrarHay palabras que, como semillas, caerán en tierra fértil. El progreso y el futuro de la humanidad se define al atreverse a soñar haciendo adobes y no claudicar hasta lograr lo que realmente importa. Gracias por tu reflexión y sobre todo por tu ejemplo. Como alguna vez se nos dijo: los reconocimientos no son sólo por lo que ya han hecho, son sobre todo para lo que habrán de hacer. ¡Enhorabuena!
ResponderBorrarBien estimado amigo, Creo que tienes que escribir el prologo de mi próximo libro YA TE ENVIO , si lo aceptas...Muy ingenioso en recorrer y hacer vivir el tiempo de la vida a través de un escrito, fracasos, éxitos, incertidumbres, son complementos que llena el camino de experiencias, pero hay que saber escoger las positivas..para enseñar de este lindo paraíso.
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