Viernes 14 de abril de 2023
Letras de Arenas
Pepe Arenas, presenta:
“Las Peripecias, por P.
Périz Copio”
MADUREZ
Llegué
tardísimo a la casa de mi tía Rita Périz, la viuda de mi tío Luciano. Me
esperaban a comer y tuve que hablar desde mi celular para decirles que comenzaran
sin mí, pues estaba en un atoro, uno más, provocado por la falta de agua. Tal
parece que es la única forma que tienen los habitantes de esta ciudad para
manifestar su inconformidad porque pasan días y días y no se oye el dulce
sonido del chorro cayendo en el tinaco. Ni modo, tuve que esperar.
Felizmente
esa mañana desayuné opíparamente. De hecho, es el alimento al que más valor le
asigno, pues es como echar a andar el motor del auto, para que funcione todo el
día, luego de una larga noche sin gasolina.
Con
mi tía estaban sus hijos, mis primos Martina, que va muy avanzada en sus
estudios de Derecho en la UNAM, al punto en que ya inició a escribir su tesis,
no obstante que le faltan dos semestres –le recordé el caso de la plagiaria,
para que no le pase lo mismo-; y su hermano, Patricio, al que llamamos Pato en
la familia. Fue una grata sorpresa ver que ahí se encontraba también otra
prima, Amalia, profesora de carrera, que se ha especializado en los dos últimos
grados de la Primaria y ya está dando clases también en Secundaria, me platicó.
Aunque
no me esperaron para iniciar la comida, mi tía, siempre amable y considerada,
mantuvo en el fuego los sagrados alimentos: una deliciosa crema de cilantro con
trozos de queso manchego, albondigón con su respectivo huevo duro al centro,
ensalada de berros y de postre, gelatina de grosella. Me dijo que no fuese a
llevar el consabido mezcal Oxhoa, pues aún no se acaba la botella anterior, así
que llegué con flores.
Mientras
comía, ellos hablaban de uno más de los temas obligados: la pretensión de los
legisladores de reducir la edad de los aspirantes a legisladores, de 21 a 18
años; y los secretarios de estado, a los 25.
⸺
No puedo creer que en serio estén considerando que un chamaco de 18 años esté
en aptitud de crear o modificar leyes, si no han concluido siquiera una
licenciatura⸺ decía mi prima Amalia.
⸺
A ver prima, eso no es el único pero
en esto: te aseguro que de los 500 diputados, y muchos tienen hasta maestría;
sin embargo, sólo atienden al interés de los partidos políticos que los
postularon, además de que sin duda muchos acusan una grave ausencia de sentido
común, por decir lo menos. Una licenciatura no es garantía⸺ apuntó Pato, quizá
en defensa propia, pues él abandonó su carrera de ingeniero en Sistemas.
⸺
Vamos en el sentido contrario, me parece⸺ terció mi tía⸺ si ya es un absurdo
que haya senadores de menos de 40 años, cuando el Senado debe ser de senectos,
de ahí el nombre, es decir de adultos ya mayores, con experiencia y
conocimientos de la vida, para orientar a los jóvenes. ¿Cómo esperar que un
chamaco de 18 años haga leyes?
Cuando
estaba por aportar mi opinión, Martina dijo:
⸺
Dudo mucho que esa iniciativa pase siquiera la primera discusión en el Senado.
Es, me parece, otro distractor, porque al mismo tiempo entró la que pretende
limitar al Tribunal Federal Electoral para beneficio de los partidos. Si no me
creen, esperemos unos días y ya verán.
La
gelatina estaba riquísima.
josearenasmerino@gmail.com
0 Comentarios