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IDIOMA

 Miércoles 29 de marzo de 2023


Letras de Arenas

Pepe Arenas, presenta:

“Las Peripecias, por P. Périz Copio”

IDIOMA

Pasó mucho tiempo, quizá casi un año, desde la más reciente visita a la casa de mis tíos Arnulfo Copio y su esposa, mi tía Adolfina. Vivimos en la misma ciudad, pero la vida se ha complicado tanto, que a pesar de ello, transcurren los meses y, sólo porque tenemos los benditos –o malditos, dirían otros– teléfonos celulares, no nos sentimos tan lejanos. Lo digo, porque así como a ellos, a otros parientes también les llamo con relativa frecuencia para saber cómo están.

Precisamente a mi celular me llamó Fermín, mi primo, hijo del tío Arnulfo, para decirme que celebrarían su cumpleaños y me esperaban para acompañarlo, y que mi tía se ocuparía de preparar lo que más le gusta comer a su papá: jaibas en chilpachole. No lo dudé un momento y acepté gustoso.

Cuando llegué, botella de mezcal en ristre, me llevé la sorpresa de que también habían sido invitados mi primo Felipe Copio Solís y Martha, su esposa, profesora de Español en la Secundaria y su hija Florencia, quien es además su alumna.

Me dio muchísimo gusto ver a mi tío Arnulfo, y sobre todo, verlo sano, jovial. Se lo dije y me respondió:

⸺ Te agradezco el cumplido, hijo. Ya ves, no faltó quien me imaginó en la poltrona y viendo la televisión, una vez jubilado; pero nada de eso, sigo activo: ahora doy clases particulares y así me mantengo al día y, además, gano un dinerito extra para compensar la pensión, que apenas es suficiente para lo indispensable.

Florencia, mi sobrina, se negó a comer jaibas, así que mi tía Adolfina le ofreció algo más, no recuerdo qué.

Luego de los aperitivos, y ya sentados en el comedor, Martha le preguntó al tío si ya estaba enterado de lo se convirtió ya en un tema candente: los libros de texto para Primaria, en particular de su materia, el Español. La respuesta de mi tío fue que no, que ignoraba el asunto.

⸺ Bueno tío, espero no echarle a perder sus jaibas –que por cierto están riquísimas, tía–, pero la cuestión es que ahora, según los “expertos en educación” a quienes les encomendaron la redacción, admiten términos como “fuistes” y “dijistes”, entre otros, así como pleonasmos como “sube para arriba” o “entra para adentro”, o “su carro de él”. En mi escuela, los padres de familia están, como los maestros, alarmados por estas medidas. Vamos para atrás, tío⸺ dijo Martha, esperando su reacción.

Y desde la experiencia de un hombre casi octogenario, respondió:

⸺ Todo sea por complacer a quien así se expresa desde el más alto sitial del Poder. Pero, hija, eso no será para siempre: a veces, para avanzar más, es necesario retroceder un poco.

También el postre fue el favorito de mi tío: chongos zamoranos. Exquisitos.

josearenasmerino@gmail.com 

 

 

 

 


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