Miércoles 17 de noviembre de 2021
EN LAS
NUBES
Dejemos
la tristeza
Carlos Ravelo Galindo, afirma:
Un empate entre
Washington, México, y Canadá, sería, al menos, justo. Esperemos confiados en
nuestro jugador estrella, “el mañanero”
A reir.
A un abuelo que camina
por una calle de la zona roja, una mujer de un centro de entretenimiento lo
llama con burla, y le dice: -
"Oye abuelo, ¿por qué no entras a pasar
un buen rato?"
El hombre mayor le responde: -
"No, señorita, gracias pero ya no
puedo"
La mujer le dice: - "¿Por qué no vienes y
lo intentas?" El nonagenario entra y lo hace como si fuera un joven de 20
años. –
"¡Vaya!
dice la mujer. Y decía que ya no podía..."
El hombre le
dice: -
"¡Lo que ya
no puedo es pagar, porque me han recortado la pensión!"
Un hombre rico
de 80 años se casó con una hermosa joven rubia de 25 años.
Después de un
año de matrimonio, la lleva al hospital para dar a luz. Sorprendido el médico
le pregunta: -
“Señor disculpe la pregunta pero ¿es su hijo?”
“Claro que es mi hijo, el motor todavía
funciona", responde orgulloso el anciano.
Al año siguiente
la mujer de nuevo queda embarazada y el marido la lleva al hospital para dar a
luz por segunda vez.
El mismo médico
la atiende y le dice al anciano:
“Me tiene impresionado otro bebé y a su
avanzada edad”
A lo que el varón
le responde orgulloso:
“Doctor, el motor todavía funciona”
Unas horas más
tarde, el médico sale de la sala de partos, y le dice:
“Bueno, señor,
es necesario que cambie el aceite del motor, porque este bebé le nació de otro
color”
Un monje se
encontraba sentado al lado de un vaquero texano en un vuelo de México a Texas.
Cuando el avión
ya estaba en el aire, la azafata comenzó a pasar por los asientos con el
carrito de las bebidas y preguntando qué es lo que deseaban beber.
El vaquero pidió
un whisky doble con hielo y la azafata lo atendió de inmediato.
El monje miró al vaquero con desprecio, él
veía el alcohol como algo prohibido.
Sin embargo, la
azafata le preguntó al monje si le gustaría tomar una copa.
A lo que el
monje respondió con disgusto:
No señorita,
prefiero ser violado por prostitutas descaradas que dejar que el licor toque
mis labios.
El texano
devolvió su bebida a la señorita y le dijo:
¡Yo también!…No sabía que podíamos elegir otras opciones.
-Un hombre acude a la iglesia y le dice al
sacerdote:
"Buen día
padre, quería ver si me bautizaba a mi perro" - "¿Pero qué dices?
Los perros no se
bautizan, lo puedo bendecir el día San Antonio, pero nada
más", le responde el padre indignado. –
"Padre, por
favor yo quiero que lo bautice, mi perro es parte de la familia. Además quiero
decirle que si lo bautiza le dejaré un donativo de $20,000 dólares para la
iglesia"
El padre se queda pensando y le dice: -
"Bueno, pero tráelo ahora rápido"
Entonces el
padre bautiza al perro.
Al mes llega el
señor obispo de visita a la iglesia y le dice al padre: -
“Me habías dicho que no había dinero en la
iglesia, pero acabo de revisar las finanzas junto con el contador y me dicen
que todo marcha sobre ruedas” –
“Señor obispo,
le voy a decir la verdad, un hombre me pagó para que bautizara a su perro y
pues acepté”, dijo el padre apenado. –
“¿Qué, cómo que
aceptaste? Está prohibido darle sacramento a un animal, pero ya lo
hiciste y dime ¿cuánto te pago? –
“$20,000 dólares”
El obispo cambió de inmediato su actitud y ya
más tranquilo le dice: -
“Y bueno ¿no te dijo nada de la primera comunión?”
Nos manda un ofrecimiento el abogado Gabriel.
“A partir fe hoy dejaré de beber, porque hace daño a la
larga. Me lo confirmaron. Y ese organo es muy importante para mí”.
Una familia iba de vacaciones en el automóvil
familiar. La suegra no dejaba de gritar, molestar y era algo insoportable. El
esposo estaba enfurecido por la reacción de la suegra.
Llegó al punto
máximo de enojo así que detuvo el auto, se bajó, abrió la
cajuela y le dijo a su suegra:
¡Bueno pues
suegra, si tanto quiere, venga a sentarse aquí adelante con nosotros!
Llega un hombre con un ataque de ansiedad al
psicólogo y le dice: - Me siento muy ansioso, tengo ya tres semanas de soñar
que mi suegra quiere comerme pero viene montada sobre un cocodrilo gigante. –
¿Está seguro
sobre el sueño? ¡Sí! Me da terror de solo recordar esos ojos amarillos
saltones, su piel escamosa, su tamaño enorme y esos dientes tan afilados. -
¡
Qué
terrible!
¡Espere doctor,
que no he terminado de contarle todo el sueño, ahora le describo el cocodrilo
Eduardo sale de
casa con mucha prisa y al ver un lugar vacío cerca de su trabajo, estaciona su
auto. Satisfecho por la suerte que tuvo al encontrar un buen sitio, se
retira.
En eso llega un
policía de vialidad y le dice:
”Señor, no puede
dejar su auto en ese lugar, no sé si lo notó pero lo ha estacionado justo
frente a la Cámara de Diputados y Senadores, y en poco tiempo terminará la
sesión y saldrán del recinto, por lo que tenemos que ser precavidos”
A lo que Eduardo
le responde: - “No hay problema señor policía, mi auto tiene alarma satelital y
está asegurado contra robo, no me preocupa lo que le pueda pasar”.
Juan José, un
hombre millonario de 60 años, aparece un día en el club de golf con su nueva
esposa, una ardiente joven de 28 años.
Sus amigos están
asombrados.
"No hay forma de que alguien tan joven y
atractivo esté de acuerdo en casarse con un viejo como tú. ¿Cómo lo
lograste?"
"Es
simple", dice Juan José, "le mentí sobre mi edad".
"¿Le dijiste que tenías 50 años?"
preguntan sus amigos.
Juan José niega
con la cabeza.
"¡No hay
forma de que pueda creer que tienes 40 años!". Ellos exclaman. Juan José
vuelve a negar con la cabeza.
"Entonces, ¿cuántos años le dijiste que tenías
exactamente?" Juan José sonríe y dice "le dije que tenía 85".
Un arquitecto
que estaba de vacaciones en la Riviera conoció a un viejo amigo abogado y le
preguntó qué hacía allí.
El abogado
respondió: “¿Recuerdas ese pésimo inmueble que compré? Bueno, se incendió, así
que aquí estoy con las ganancias del seguro contra incendios. Y tú ¿Qué estás
haciendo aquí?" El arquitecto respondió: “¿Recuerdas esa pésima propiedad
inmobiliaria que tenía en Mississippi? Bueno, el río se desbordó y aquí estoy
con los ingresos del seguro contra inundaciones ".
El abogado
pareció desconcertado. "Vaya", preguntó, "¿Y cómo lograste
provocar una inundación?"
craveloygalindo@gmail.com
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