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SER MÉDICO COVID ES COMO VIVIR UNA PELÍCULA DE TERROR: DR. PEDRO MARTÍNEZ

 Miércoles 27 de enero de 2021





SER MÉDICO COVID ES COMO VIVIR UNA PELÍCULA DE TERROR: DR. PEDRO MARTÍNEZ

 

*EL COVID-19 ME LLEVO A SUFRIR UN SEVERO DAÑO PSICOLOGICO, ASEGURA

*EN LA UNIVERSIDAD NO TE PREPARAN PARA PARA VER A TANTO PACIENTES MORIR

 

Por Lupita Díaz

Ser médico en un área de COVID es vivir dentro de una película de terror, recibir pacientes que son sedados para ser Intubados, colocarles sondas por donde pasa la comida porque ellos tendrán un tubo en su tráquea que no les permite la entrada de alimento para estar ventilados, muchas de las veces sin cambios positivos, es desesperante y frustrante. En ninguna universidad se nos entrena para ver a los pacientes morir; se nos entrena para que con nuestro conocimiento se le ayude al paciente a sanar y a tener mejora en su estilo de vida, incluso en muchas ocasiones para salvarles la vida misma, declaró para El Diario de Matamoros, el médico con especialidad en medicina familiar, Pedro Martínez Alamillo.

Yo viví una situación terrible de daño psicológico, ya que al llegar a casa era muy difícil para mí conciliar el sueño, cuando por fin lograba conciliarlo, se presentaban las pesadillas, me despertaba gritando, temblando, sudando, con taquicardia, porque las pesadillas eran horribles, como salidas de una película de terror y todas ellas recurrentemente relacionadas con elementos de mi familia. Me aislé completamente, sentí un desgaste físico, pero lo más grave es el estrés, el trauma que nos genera regresar a casa después de ver las escenas diarias de sufrimiento, es difícil de explicarlo, se tiene que vivirlo, expresó el médico que labora en la Clínica 79 del IMSS.

Fui diagnosticado por stress postraumático, que es lo mismo que se le sucede al soldado que regresa de la guerra por vivir y ser parte de escenas terribles; en nuestro caso es por estar en constante exposición a este tipo de agresión de la falta de control hacia el ambiente, de estar consciente de que, en cualquier momento puedes contaminarte y contagiar a la familia y ese sentimiento de gran temor de pensar que puedes ocasionar no sólo la enfermedad, sino la muerte de tus seres queridos o peor aún dejarlos desamparados, es terrible, explicó sobrio y cabizbajo el Dr. Martínez, quien es egresado de la UAT y cuenta con una especialidad en medicina familiar.

Viví muchos meses de estrés y angustia y no trato de culpar a alguien, este es mi trabajo para esto me formé, sin embargo, esta pandemia nos ha presentado situaciones críticas, estar enfrentándose al sufrimiento del paciente, que pasan la noche sentados, abrazados de la mesa de los alimentos, sin querer comer porque comer significa respirar y eso roba el aire que requieren para seguir vivos. También, es muy triste ver a los familiares cansados de estar afuera del hospital esperando noticias favorables sobre la salud de su familiar, y el hecho de ir y dar en muchas ocasiones la noticia de que su paciente o familiar está grave y que se les está dando toda la atención y que aun así nada asegura que pueda sanar es una situación muy difícil que crea un desgaste psicológico, declaró el galeno.

Asimismo, nos ha enfrentado esta crisis médica al dolor, al coraje, a la impotencia, estando atendiendo en un hospital COVID me tocó atender a una familia con un paciente contagiado y fueron agresivos conmigo y no los culpo estaban desesperados y querían que yo les diera una esperanza, pero no podía hacerlo, eso fue una situación terrible. 

 Yo me preparé profesionalmente para atender mi consulta, y esa es mi vocación, se nos prepara para actuar, para sedar, intubar, colocar sondas, pero no nos preparan para atender pacientes que mueren rápidamente, para estar de espectadores ante una cama con un paciente con ventilador y con un tratamiento que la OMS determina, que se nos dice que así se debe de actuar. Observar las máquinas de respiración y estar esperando cambios positivos en el paciente es desesperante y frustrante, cuando pasaba precisamente lo contrario, se nos morían, luego vemos que entraron pacientes sin sintomatología COVID y al pasar los días empezamos a sospechar que ya estaban contagiados, han sido meses terribles, confesó afligido el Dr. Martínez Alamillo.

A esto se le debe sumar que en urgencias se nos estaban contagiando doctores, y vimos como personal médico joven sin morbilidad o enfermedad per sé,  morían, otros a la fecha están internados con fibrosis y esperando trasplantes pulmonares, al paso de los días ya no teníamos el material adecuado, esto nos mantenía en zozobra, vimos como una pareja de médicos, que eran matrimonio,  fallecieron, y los que entramos a área COVID empezamos a pensar cuando me tocará a mí, cuando me iré a contagiar, es un desgaste físico y un desgaste emocional, atender a los compañeros y amigos fue algo fuerte emocionalmente, ver ahora como sus pulmones están fuertemente dañados con pulmones de bebé porque la capacidad pulmonar es menor comparable al de un pequeño recién nacido y obviamente esta capacidad no puede sustentar al cuerpo de un adulto, explicó detalladamente el médico.

No todos están preparados para entrar a estas áreas, se requiere de temple, muchos médicos antes de entrar se sentaban a llorar enfermeras que se quedaban paralizadas y no podían entrar, porque pensaban no solo en el peligro que ellos corrían, sino por el temor de ir a contagiar a sus familias, finalizó

 

PROTOCOLOS PARA RECIBIR CONSULTA MEDICA

El paciente llega a la clínica y en la puerta principal hay médicos y coordinadores que realizan el primer filtro donde hacen la discriminación de si es paciente COVID o no; si los síntomas no sugestivos de COVID entrará a la clínica y será atendido por su médico familiar, si presenta síntomas que son compatibles con COVID, pasará al módulo respiratorio, porque es sospechoso de contagio.

Una vez que el paciente pasa al módulo respiratorio, se hace otro filtro, se le toma signos vitales, presión, temperatura, oxigenación de sangre, se les pasa con otro médico donde lo interrogará para verificar si trae criterios mayores como dolor de cabeza, dolor de pecho y falta de aire, o si por el contrario sus síntomas son menores, como no percibir sabores, aromas, dolores de articulaciones, dolor opresivo en el pecho, diarrea, vómito, que le haga sugerir al médico que si trae la enfermedad, se le envía  a su casa con indicaciones, se le da seguimiento por teléfono para ver los cambios que están presentando y así seguir atendiendo al paciente. Y en un momento dado darle indicación de que se presente al hospital en caso de agravar.

El mayor temor de un médico es un contagio de un virus respiratorio, porque su tasa de contagio es superior a cualquier otros virus, como por ejemplo el zika, chicuncunya  se requiere de un vector (bicho) es decir de un mosquito (zancudo) para que pueda contagiar, a diferencia del COVID que somos nosotros mismos quienes provocamos el contagio sin necesidad de un vector(bicho), eso lo vuelve complicado porque  somos altamente sociables y es difícil contener a las personas en casa, como se ha estado viendo en los últimos meses, que a pesar de los llamados de quedarse en casa la mayoría de la población no lo ha practicado, explicó el profesional de la salud Martínez Alamillo

EL PERSONAL DE PRIMERA LINEA SI RECIBIO VACUNAS

Los médicos y personal que laboran en las clínicas no son considerados personal de primera línea COVID, en el entrenamiento que se nos dio desde que inicio la pandemia, eso quedó muy claro, solo el personal de los hospitales es considerado primera línea porque ellos están atendiendo a quienes están positivos y son sujetos a contagio, explicó el entrevistado.

Llegaron las vacunas para el personal de primera línea y fueron aplicadas y quedaron algunas más para el personal de segunda línea, que son aquellos que laboran en  las clínica, sólo que no hubo suficientes para todos, esperamos que haya otra remesa para completar la vacunación de todo el personal, y que el personal médico, enfermeros, afanadores, estén seguros y se sientan cómodos para entrar a trabajar.

Al cuestionársele sobre el criterio que tomaron los directivos para aplicar las vacunas al personal de segunda línea contestó:

Pienso que no hubo un criterio tangible los médicos estaban rotando en el área COVID, sólo aquellos que tenían alguna morbilidad como ser asmáticos, diabéticos, hipertensos, no entraban a esta área.

¿Cuál cree que fue el criterio para no aplicar pruebas a todas las personas? Creo que todos queremos hacer lo mejor con que tenemos la prueba de PCR tiene un costo elevado, por eso es que no hay suficientes pruebas, hacer pruebas sería lo mejor para localizar a los implicados y tratar de mitigar el problema, pero esto es muy costoso, puntualizó.

 

 

 

 

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