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Yo soy la esperanza. Mantenme encendida

 Viernes 25 de diciembre de 2020



25 de diciembre de 2020

EN LAS NUBES

Yo soy la esperanza. Mantenme encendida.

Carlos Ravelo Galindo, afirma:

El adviento es el anuncio de que nacerá el Salvador. Y que mejor para comprenderlo. Entenderlo con esta narración escrita.

Compartimos también el saludo cordial del escritor Abraham Mohamed Zamilpa que nos dice:

“En este cierre de año 2020 serían muy tristes mis comentarios y por eso solo puedo recomendarles que se cuiden mucho con sus familias y rueguen porque Dios nos haga el milagro de librarnos pronto de todos los males que tanto daño nos hacen”.

Coincidimos com el autor de “Candelero”

Es cierto que vivimos momentos dificiles... tiempos de oscuras tormentas...

Por eso pedimos que la esperanza nunca se apague dentro de nuestro corazon.

Aprovechemos este tiempo de adviento que el señor nos ofrece para revisar nuestras vidas y corregir nuestros errores.

El nos llama a la conversion ¡...y que cada uno de nosotros sepamos ser la herramienta que ese niño necesitó para mantener la esperanza, la fe, la paz y el amor!

 

La hemos intitulado las cuatro velas.

 Es, en verdad un signo redentor en Navidad.

Las cuatro velas los cuatro domingos de adviento.

Las cuatro velas se quemaban lentamente.

El ambiente estaba tan silencioso que se podia oir el dialogo que mantenian

La primera dijo: ¡yo soy la paz!  sin embargo, las personas no consiguen mantenerme.   Creo que me voy a apagar.

Disminuyó su fuego rapidamente y se apago completamente.

Dijo la segunda:  ¡yo soy la fe!  Lamentablemente soy supérflua. Las personas no quieren saber de mi.

No tiene sentido permanecer encendida.

Cuando termino de hablar, una brisa pasó, suavemente sobre ella y se apago.

         Rapida y triste la tercera vela se manifesto: ¡yo soy el amor!  No tengo fuerzas para seguir encendida. Las personas me dejan a un lado y no comprenden la importancia de esto.

Se olvidan hasta de aquellos que estan muy cerca. Hay demasiado odio.

Y, sin esperar se apago.

 De repente...entro un niño y vio las tres velas apagadas.

¿que es esto?  ustedes debian estar encendidas hasta el final.

Al decir esto, comenzo a llorar.

Entonces la cuarta vela hablo:

No tengas miedo, mientras yo tenga fuego podremos encender las demas velas, yo soy ¡la esperanza!

Con los ojos brillantes, agarro la vela que estaba encendida ...

y encendio las demas.

Es cierto que vivimos momentos dificiles... tiempos de oscuras tormentas...

¡Que la esperanza nunca se apague dentro de nuestro corazon!

aprovechemos este tiempo de adviento que el señor nos ofrece para revisar nuestras vidas y corregir nuestros errores.

El nos llama a la conversion ¡...y que cada uno de nosotros sepamos ser la herramienta que ese niño necesitó para mantener la esperanza, la fe, la paz y el amor!

Queremos desear Feliz Navidad a todos, después de esta delicadeza de José Antonio Aspiros y su esposa la también escritora Norma Vasquez Alanis sobre las Nubes de ayer 24.

Estimado amigo: hoy fue dia de preparativos, así haya sido solamente para una cena adecuada, pero sin más nada de parafernália.

 Pero me di un tiempo ya tarde para revisar mis correos, entre ellos primero tus Nubes.

 El relato de tus Navidades es muy parecido al de numerosas generaciones, la mía entre ellas, y los recuerdos a veces provocan nostalgia.

 Para mí se acabaron las posadas cuando las letanías se volvieron cumbias, y las procesiones dieron paso a los bailes de salón; algo ordinario como cualquier otro día del año.

 La sidra y el ponche cedieron ante las bebidas fuertes y las piñatas se quedaron para las fiestas de cumpleaños.

Ah, y cuando el arbolito y las "villas navideñas" desbancaron al Nacimiento.

Qué bueno que alcanzamos a vivir aquellas costumbres, más con un sentido religioso y familiar, que de simple diversión mundana”.

craveloygalindo@gmail.com

 

 

 

 

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